Matías Sánchez, periodista UDD y redactor en Revista Sábado de El Mercurio, habla de los reconocimientos que ha recibido por su trabajo en los últimos cuatro años.

Hace algunos años, cuando Matías Sánchez egresaba de Periodismo UDD, recibió el primer correo de la Universidad Alberto Hurtado advirtiéndole que era finalista del Premio Periodismo de Excelencia, categoría universitaria, con su reportaje “Caso Pololos: los jóvenes imputados de violar a sus parejas”.

Han pasado los años y, ahora como profesional, su nombre sigue siendo fijo en la lista de finalistas del concurso que distingue lo mejor del periodismo nacional, cada año. Primero con el reportaje “Buscando vida entre la muerte” (La Tercera),luego con “Un artista excepcional”, podcast del medio Relato Nacional, y este año con el reportaje “El primer accidente nuclear en Chile» (Revista Sábado de El Mercurio). LEER REPORTAJE AQUÍ

El tema surgió cuando se estrenó la serie Chernobyl, en HBO. Gazi Jalil, su editor, le pidió que reporteara el caso de un grupo de exconscriptos que había demandando al fisco por más de 43.600 millones de pesos. La denuncia legal se había realizado hace 8 años y ellos aseguraban haber sido víctimas de un accidente nuclear que sucedió en dictadura. Al momento de recibir el tema, el caso estaba próximo a entregar una sentencia.

“El valor del artículo está en haber reconstruido el relato de la noche del accidente nuclear con los testigos y protagonistas de la historia —lo que significó dos viajes, de varios días, a Curicó. Así se recopilaron documentos, realizaron entrevistas y reporteo—. En base a los testimonios de las víctimas se armó el relato de los hechos de este accidente, junto con las consecuencias que tuvieron, posteriormente, los exconscriptos. Existían diversos casos de personas enfermas de cáncer, hijos con malformaciones y muertes inesperadas, entre otras”, cuenta.

-La última vez que fuiste finalista de este premio, estabas en Tendencias de La Tercera. ¿Cómo fue el cambio a Sábado? 

-Cada artículo que escribo en Revista Sábado pone en práctica, y exige un mayor esfuerzo, de todas las herramientas que aprendí en el suplemento Tendencias, de La Tercera, y en la universidad. La Revista Sábado tiene un nivel de exigencia periodística, por el que destaca de otros medios, que te obliga a estar constantemente informado de la actualidad y reporteando diversos temas, en los que debes considerar otros puntos de vista. Ampliar tu mirada.

-¿Qué repercusión tiene en ti como profesional el que tu trabajo sea distinguido entre lo mejor del periodismo cada año?

-Las repercusiones como profesional: todas las nominaciones las considero un premio al esfuerzo, el que siempre está acompañado por todo un equipo detrás. Sobre todo en una época donde publicar en un medio de prensa escrito e impreso, no es fácil.

-De hecho, Revista Sábado pasó a las páginas del diario, las revista Paula y Qué Pasa no existen, los medios escritos se reducen o cierran sus ediciones impresas… justo en momentos en que se necesita más periodismo de investigación y calidad ¿Cómo se ve el panorama desde dentro?

-Es lamentable el cierre ambas revistas, las que tuvieron gran importancia en la historia del periodismo en Chile. Revista Sábado cambió de papel y se convirtió en un cuerpo del diario, pero su contenido se mantiene. El mismo equipo trabaja, frente a cualquier contingencia, por mantener un alto estándar en sus entrevistas, crónicas y reportajes de investigación.

-¿De qué manera Periodismo UDD ayudó a que tuvieras estos logros?

-La educación práctica de la carrera me permitió obtener estos logros: en el ramo de Creación Escrita, aprendí herramientas narrativas; en Storytelling, ejercité las estructuras de las historias y en Taller de Investigación Periodística, perfeccioné el reporteo.