Por Victoria Squella y Pablo Vargas.
Después de una larga de noche de reporteo en espera de los resultados de la elección, hoy nos reunimos alrededor 11 am en el lobby del hotel para dirigirnos al monumento de Abraham Lincoln para seguir con nuestro trabajo.
Allí nos encontramos con un lugar hermoso, que representa a nuestro parecer todo lo que es Estados Unidos, después de una elecciones históricas, se sentía pesado el ambiente ante la victoria de Donald Trump, al ser Washington DC una ciudad demócrata no sabíamos que esperar al salir de la calle, ya que la noche anterior el panorama ya había estado difícil para realizar entrevistas en la calle.
Después de organizarnos entrevistamos a alumnas personas y preguntamos cuáles serían los deseos de los ciudadanos para el nuevo presidente.
Tuvimos la tarde libre para terminar nuestros reporteos, despachos y algunos videos que grabamos en toda nuestra estancia en Washington DC, además de recorrer diferentes puntos de la ciudad por última vez y así despedirnos lo mejor posible y sacar el mayor provecho de esta tremenda experiencia.
Al ser nuestro último día cómo grupo, nos despedimos de manera adecuada con una cena en el restaurante The Hamilton, ubicado a solo 15 minutos de nuestro hotel y cercano a La Casa Blanca, donde compartimos las anécdotas y alegrías vividas durante esta tremenda experiencia que vivimos juntos como un gran grupo de trabajo.
Además, disfrutamos de una tremenda gastronomía que nos ofreció el local en donde las risas no faltaron y todos quedamos saciados de nuestra hambre, pero también de conocimiento que adquirimos durante estos ocho días. Terminamos la comida con unas palabras de los profesores y dimos cierre a todo lo vivido, sin olvidar todo lo que aprendimos y lo mucho que nos hizo crecer esta gran experiencia.
Algunos de nosotros agradecimos a Washington DC, visitando las oficinas del Washington Post, soñando con algún día poder ingresar a esas instalaciones como periodistas de ese medio, Además agradecimos a la capital de Estados Unidos por ser nuestro hogar durante esta semana intensa de trabajo, y que además nos proporcionó un crecimiento no solo profesional, sino que también personal.
Logramos hacer nuevas amistades que esperamos que puedan perdurar a lo largo de nuestras vidas y que este viaje académico guarde un espacio especial en el corazón de cada uno de nosotros que tuvo la oportunidad de viajar hasta acá, y si bien nos iremos con una tremenda tristeza, la 6th Street de Washington DC (donde estaba nuestro hotel) sin duda tendrá un gran significado para todos nosotros.