En el marco de la II Conferencia Anual UDD Exponencial: Bienestar y Felicidad, la investigadora de la Facultad de Comunicaciones, María José Labrador fue invitada al evento para comentar la ponencia El Microscopio Humano: Cómo el Big Data ofrece una ventana a nuestra Psicología de la científica social computacional y profesora asociada en la Escuela de Negocios de Columbia University, Sandra Matz. Quien expuso sobre lo que puede decir o arrojar la huella digital de las personas en relación a sus características sociopsicológicas.
La Investigadora de la Facultad de Comunicaciones planteó que comparte diversas perspectivas con Matz “lo que confirma que las diferentes áreas del conocimiento conversan cada vez con más pujanza y solidez y por ello el valor de la interdisciplina es una de mayores urgencias del pensamiento contemporáneo”. Dividió su comentario en tres ideas clave: la primera en el marco del evento ¿Qué entendemos por bienestar?, ¿Qué es la felicidad?, destacando un punto de especial interés en la ponencia de la Profesora Matz y que pone atención a la espiritualidad, un aspecto sobre el que se hace poco énfasis en la actualidad y que, sin embargo, lleva implícito el deseo o aspiración que descubrimos en lo más profundo de nuestro ser de alcanzar una felicidad perfecta e inacabable que es poco posible en su opinión sin un sentido de trascendencia o al menos la búsqueda de este.
En la segunda idea, Labrador planteó que las ciudades inteligentes generan numerosas posibilidades de colaboración entre el sector público y el privado, en relación al capital humano, la cohesión social, la economía, la gobernanza, el medio ambiente, la movilidad y el transporte, la planificación urbana y la proyección internacional y por supuesto la tecnología. Siendo este último punto crucial ya que el potencial del Big Data aumenta día a día, al igual que lo hace el debate sobre la ética de los datos.
En ese sentido destaca que los medios digitales actualmente se encuentran en una verdadera encrucijada frente al algoritmo de Google en su funcionalidad trends y discover como determinantes de interés de los contenidos preferidos por las audiencias y con los que trabajan estos medios. Apuntó, que esto a la vista no genera bienestar al entorno mediático digital ya que la tecnología no es el problema, sino cómo se utiliza por las grandes plataformas y si este uso se ciñe a criterios de responsabilidad y democracia.
Finalmente, en su tercera idea puso el énfasis en los riesgos y vulnerabilidades con el uso de nuestros datos personales que inciden particularmente en la esfera de la privacidad e intimidad y de la llamada identidad digital, comentando que en Chile en agosto se dio un gran paso con la aprobación de la Ley de Protección de Datos que actualiza la legislación vigente y eleva el estándar de protección a los derechos de las personas.
Por último, la profesora Labrador destacó que una de las problemáticas de mayor riesgo y en las que he trabajado junto con otros investigadores en los últimos años es la desinformación expresada mediante desórdenes informativos que inciden en todo tipo de procesos sociales y democráticos, señalando que el tema más complejo radica en las características de la desinformación, más que en la cantidad de desinformación y constituye un verdadero desafío con relación a los procesos electorales y a la gestión y usos de los datos personales.