Camila Mercadal, cineasta UDD egresada como montajista de la película “Volantín Cortao”, habla de su aventura en Alemania donde realiza un master en montaje en la Filmuniversität Babelsberg Konrad Wolf.
Hace algunos años, Camila Mercadal decidió continuar su carrera en Alemania. La cineasta UDD es estudiante del master en montaje en la Filmuniversität Babelsberg Konrad Wolf, en Berlín, universidad que imparte únicamente carreras relacionadas al cine.
“En mi área tengo distintos profesores que de una u otra manera se dedican al montaje, ya sea de ficción, documental, o formas experimentales, y por lo tanto, tengo asesorías específicas dependiendo de los proyectos en los que trabaje y los que puedo elegir libremente. Sobre todo ha sido para mi un gran lugar para experimentar y ahondar en los temas que me interesan. Es un espacio creativo muy interesante”, cuenta.
En efecto, luego de realizar el montaje del largometraje de egreso “Volantín Cortao” (2012) –“un gran aprendizaje que nos reafirmó la convicción de que con trabajo se logran cosas buenas”, dice-, se ha dedicado a montar diferentes filmes. Actualmente trabaja con Enrique Farías en el corto “Apuntes sobre la muerte” y está terminando un largo con Nicolás Molina (“Los castores”). En enero comienza un proyecto documental sobre una cárcel isla italiana en el mediterráneo.
-¿De qué manera estudiar en Cine UDD te ayudó a desempeñarte en tu profesión?
-Una de las cosas que más valoro es el buen equilibrio que nos entregaron entre los conocimientos teóricos y los prácticos. Conozco gente que sabe mucho de teoría, pero ha estado poco en rodaje o en una sala de montaje, y viceversa. Si bien cada persona se acerca al cine de una manera distinta, creo que si aspiras a insertarte en el medio internacional tienes que ahondar en las dos cosas. En cine UDD tuvimos profesores muy bien preparados, que nos guiaron por un camino que para mi fue muy enriquecedor.
-¿Qué le recomendarías a los alumnos que quieren dedicarse al montaje?
-Que vean mucho cine (aunque esto es requisito no solo para el montaje, sino para cualquier área). Que aprendan a comunicarse con calma y a entender sus propios procesos, porque así la búsqueda en la sala montaje se hace más creativa y entretenida. El montaje a veces se ve como una fase más tranquila que el rodaje, pero puede llegar a ser muy intenso y uno se puede perder fácilmente en el camino. Para esto es importante tener las metas claras y saber escuchar opiniones.