Ayer en el Teatro Huemul se realizó la ceremonia de premiación del Consejo Nacional de Televisión y nuestro director de escuela, Marcelo Ferrari, fue uno de los beneficiados para filmar la miniserie Puerto Hambre, basada en una historia real ocurrida en el Siglo XVI.

En esa localidad ubicada en Magallanes durante tres años, el hambre, la enfermedad, la ferocidad de la naturaleza, el desencuentro con el mundo indígena y las pugnas internas de poder, fueron provocando la muerte de la población hasta convertir a la comunidad fundada en torno al Fuerte Rey Don Felipe, en un pueblo fantasma. El único sobreviviente, Tomé Hernández, relató la historia del pueblo “Puerto Hambre” cuando fue llevado a España.

“Convertido en un vagabundo, perdido, él cuenta cómo llegaron a Magallanes, familias, soldados. El barco que los llevó se devolvió para buscar refuerzos y pertrechos, pero fue atacado por piratas ingleses y quedaron abandonados en el fin del mundo frente a las inclemencias del tiempo y el temor a los kawashkar. En los tres años que quedaron allí surgió lo mejor y lo peor del ser humano”, explica Ferrari.

El lugar es hoy una zona turística, la que será parte importante de las locaciones facilitas por el alcalde de Punta Arenas, Wladimiro Mimica. Y hasta esos parajes se trasladará el elenco formado Néstor Cantillana, Antonia Zegers, Eduardo Paxeco, Jaime Mac Mannus, Diego Ruiz y Luz Valdivieso.

Según el director, “nos produce gran placer cinematográfico el desafío de contar una historia que tiene que ver con los orígenes de nuestra tierra y sobre todo en un lugar al que muy pocas veces llegan las cámaras. Tiene todo el atractivo y el valor de ser una historia perdida en el tiempo”.

Puerto Hambre, producida por la productora Buen Puerto, fue una de las tres miniseries históricas que recibieron financiamiento para su producción ($279.775.490 del Fondo-CNTV), lo que servirá para enfrentar los desafíos de una puesta en escena enorme para una serie histórica.