Nació como un trabajo del ramo de taller de realización de cuarto año del profesor Fernando Lavanderos, cuyo rodaje tuvo lugar en abril de 2010. El resultado fue tan bueno, que después de recibir las críticas y afinar elementos del montaje, decidieron enviarlo al SANFIC 6, la sexta edición del Santiago Festival Internacional de Cine, que se realizará entre el 17 y el 23 de agosto.

Los films seleccionados, además de “Anónimo”, fueron “A orillas de la ciudad”, de Pachi Bustos; “El año del tigre”, de Sebastián Lelio; “La espera”, de Francisca Fuenzalida; “Mapa para conversar”, de Constanza Fernández; y “Perro al revés”, de Antonio Albagli.

Los trabajos elegidos incluyen tanto a jóvenes cineastas que realizan sus primeros largometrajes, como a directores que ya tienen una trayectoria destacada, como Sebastián Lelio («La sagrada familia», «Navidad») y Pachi Bustos («Actores secundarios», «Angeles Negros»).

EL ALUMNO QUE “SUPERA” AL MAESTRO

Esta no es primera vez que “Anónimo” hace noticia. El año 2009, este largometraje -hoy tesis de titulación de sus realizadores- ganó una Beca Ibermedia para trabajar el guión con destacados productores y guionistas de Latinoamérica, entre más de 96 postulantes, de los cuales 12 fueron seleccionados para participar (dos de ellos de Chile).

Hoy, el equipo liderado por Renato Pérez (director), la guionista Camila Rodó, el productor ejecutivo Juan Ignacio Correa, recibe un importante reconocimiento, ya que dos de sus profesores, Sebastián Lelio y Francisca Fuenzalida, compiten codo a codo por los recursos que los ayudarán a finalizar su postproducción.

Juan Ignacio Correa, productor ejecutivo de “Anónimo”, habló con nosotros acerca de su película y esto fue lo que nos contó.

– ¿Cuándo y cómo surge la idea de hacer “Anónimo”?

“Anónimo” surge del interés por ver a un hombre partir desde cero -silencioso, misterioso y perturbado por su pasado- sin nada a qué aferrarse ni a quien recurrir. Esta idea se entremezcla con una curiosidad estética por el seguimiento realista, por no despegarnos de nuestro personaje, observando cada pequeño momento de su recorrido, y un tipo de narración que permite al espectador mantenerse involucrado, descubriendo la información parceladamente junto con el personaje, a medida que este la va recibiendo.

– ¿Cómo fue el trabajo del guión?

El guión se comenzó a trabajar desde el año pasado y tuvo varias etapas. En un comienzo, se trabajó en base a argumentos y con ayuda del guionista Julio Rojas y el profesor jefe de taller Fernando Lavanderos. Al tener un argumento sólido, se procedió a construir el guión, el cual tiene más menos 10 versiones. Luego se tomó un receso respecto a la escritura, lo que permitió volver a trabajar sobre él con nuevos aires que ayudaron a escribir el guión final.

– ¿Cómo fue el rodaje? ¿Cuánto duró?

El rodaje duró 24 días. Fue un proceso bastante intenso, pero muy entretenido y provechoso para todo el grupo. Se pudo poner en práctica todo lo aprendido y, asimismo, nos vimos enfrentados a situaciones que no se pueden enseñar en las salas.

– ¿Qué te produjo la película cuando la viste por primera vez?

Es muy difícil hablar de la primera vez que la vi. La he estado viendo constantemente, ya sea en partes, primeros armados, escenas por separadas, por lo que cuesta marcar una primera vez. Pero, sin duda, el primer encuentro con el material y con algunos borradores provoca cierta angustia, incluso por momentos decepción.

La transformación que va teniendo la película, desde la idea original hasta la sala de edición es tremenda. Lo que uno ha estado imaginando por tanto tiempo difícilmente va a lograr concretarse tal cual se pensó. La imagen que uno trae de rodaje suele cambiar al empezar a ver el material, pero de a poco vuelve a aparecer el reencantamiento con la película. Todo va tomando forma nuevamente; las escenas comienzan a surgir; cosas que no estaban escritas ni se pensaron refrescan; los personajes toman vida propia y, ya encontrando el ritmo de cada uno, el montaje comienza a fluir. Con ello, esa primera impresión de angustia y decepción se convierte en algo más cercano a la satisfacción.

– ¿Cuál es tu parte favorita de “Anónimo” y por qué?

Hay muchas escenas en las que se logró una conexión entre los actores, la atmósfera que aportaba la fotografía y la locación, y el lugar que la cámara elegía para mostrarnos la acción. Pero, sin duda, la secuencia del “hotel de mala muerte”, el segundo hotel de la película después de la pensión, fue la escena que cobró vida propia más rápidamente. El lugar le aportó una atmósfera instantánea, que se mezcló perfectamente con el estado emocional del personaje y el momento en la película.

– ¿Qué reacciones esperas del público?

Espero que se logre involucrar con la historia y sus personajes, que acompañe al protagonista en su recorrido, que lo juzgue para luego perdonarlo y sentir lástima por él; que nunca termine de definirlo por completo, que siempre quede algo más por descubrir.

Espero que simpatice con el personaje de Amanda, que tema por ella para volver a verse sorprendido con sus acciones, siempre mostrando que hay más de lo que vemos a primera vista. Que pueda sacar conclusiones y pensar sobre nuestra forma de ver a las personas, y cómo los prejuicios nos afectan a la hora de “clasificar” a alguien.

– ¿Qué expectativas tienes con respecto a su lanzamiento?

Esperar tener una gran taquilla en cines sería pecar de ingenuos, por el tipo de película, por la temática, por ser una ópera prima, por los números que vemos día a día en la taquilla de películas chilenas. Pero con tener la oportunidad de que “Anónimo” se exhiba en salas más chicas, dirigidas a públicos más específicos, como serían el cine arte Tobalaba, la Cineteca Nacional, etc., ya significaría una ventana importante para mostrar nuestro trabajo. Y ojala tener la posibilidad de estar en festivales tanto nacionales como internacionales, para llegar a la mayor cantidad de gente posible y de las más diversas culturas.

– ¿Ya tienes alguna otra película en mente para un tiempo más?

La verdad es que por ahora hay sólo una idea, nada concreto. Pero será algo en un estilo mucho más de experimentación e improvisación. Una película de historia mínima, con sólo dos actores, donde yo pueda entrar en una especie de juego con ellos, poniéndolos en situaciones que no conozcan y que tengan que reaccionar desde su propia intuición como personas y no como actores.

– ¿En qué momento crees que se encuentra el cine chileno?

Creo que el cine chileno está en un gran momento. La gran cantidad de gente haciendo películas; la diversidad de temáticas; las distintas formas de afrontar estas temáticas y el cine digital le han otorgado una gran ayuda en este sentido, dándole la posibilidad a más cineastas de tomar sus cámaras y contar una historia, permitiéndoles experimentar de forma más libre, y enriqueciendo la propuesta nacional.

– ¿Qué le dirías a los jóvenes que quieren o piensan estudiar cine?

Qué es una carrera muy apasionante, pero para disfrutarla debe ser justamente eso, tu pasión. Si no es así, te darás cuenta muy rápido de que tomaste la decisión equivocada, porque vas a tener que respirar y comer cine. Y si eso es lo que quieres, no esperes hasta entrar a estudiar; ve todas las películas que encuentres a tu paso, toma una cámara y graba todo lo que te cause curiosidad, lee todo lo que tenga la palabra cine, porque la mayor parte del aprendizaje vendrá de tu propio interés por aprender.

COORDENADAS: Película “Anónimo” / Director: Renato Pérez / Productor Ejecutivo: Juan Ignacio Correa / Guión: Camila Rodó, Fernando Silva / Consultor de Guión Julio Rojas / Dirección de Fotografía: Yusuke Hagiwara / Director de Arte: Constanza Castillo / Director de Producción: Marcelo Silva / Asistente de Dirección: Camila Rodó /  Continuidad: Cristián Giralda / Montaje: Gabriel Giglio / Diseño de Sonido: Fernando Silva / Cámara: Muriel Riquelme, Gabriel Giglio / Elenco Principal: Mario Ossandón, María de los Ángeles García, Andrea Freund, Marcial Tagle, Antonia Zegers, Eduardo Cumar / País: Chile / Año: 2010 / Casa Productora: Anónimo Producciones (Chile) y Universidad del Desarrollo (Chile) / Duración: 90 min.

SINOPSIS: Javier llega a vivir a la casa de su hermano, luego de un largo período de ausencia. Su familia se muestra incómoda con su presencia e intentan mantenerlo al margen de su vida cotidiana. Intentando recuperar su vida, Javier comienza la prohibida búsqueda de su hija a quien no ve desde que ella tenía 2 años. Rechazado por su familia, comienza a vivir en una pensión, donde conoce a Amanda, quien se presenta como la oportunidad de probarse como padre, pero también de enfrentarse a sus más oscuros demonios.