Actualmente está en tercer año y acaba de terminar el rodaje de “Hecatombe”, piloto de serie de ficción televisiva con sus compañeros. Esta vez Daniel Quintana fue director de arte. “Siempre tuve el bichito y me gustó. Valoro mucho que la carrera nos haga rotar en los cargos y experimentar en lo que más nos gusta”, cuenta. 

Y así ha sido. Desde que entró a la carrera ha estado a cargo de la producción del corto “Uñas pintadas”, de la dirección del corto “Cruce” y de la asistencia de producción en el premiado corto “La mamita”. 

“Lo que más me interesa es la producción, porque tiene muchos elementos que me gustan: el tema del financiamiento, las matemáticas y la gestión para que el proyecto salga adelante”, advierte.

En “Uñas pintadas” el desafío fue hacer un corto con muchos personajes, extras, locaciones y canjes. En el caso de “La mamita”, asistir a su compañera Paulina Carriel en una producción que involucró a dos grnades actrices (Catalina Saavedra y Loreto Valenzuela). Y en “Cruce” dirigir un plano secuencia. 

“Pitché la idea sobre un hombre que atropella a un joven y el mismo tiempo el atropellado ve su reanimación. Fue súper bueno dirigir, me gustó la experiencia, pero la producción me gusta más, hace que las películas existan”, dice.

-Imagino que lo que más valoras de la carrera es la experiencia que ganan los estudiantes en distintos cargos.

-Sí, podemos experimentar en todos los cargos hasta encontrar la especialidad que más nos gusta y también ponernos en los zapatos de los demás. La carrera está estructurada para aprender todo lo que involucra el cine y en cada asignatura vamos aprendiendo algo cada vez más grande, hasta llegar al largometraje.