Carolina Mardones, decana de la Facultad de Comunicaciones UDD, junto a Guido Larson y Alberto Rojas analizaron cómo fue ese conflicto bélico, el primero transmitido por las pantallas de televisión.
En 1991 se inició un conflicto bélico que marcó una diferencia clave con respecto a guerras anteriores: fue transmitido por televisión y por primera vez se vieron en directo imágenes de lo que ocurría en los campos de batalla. La Guerra del Golfo entre Estados Unidos e Irak marcó así un hito en la historia del periodismo televisivo.
“En vivo desde la Guerra del Golfo: a 30 años del conflicto” fue el nombre del conversatorio organizado por el Instituto de Humanidades de la UDD que tuvo como panelistas a Alberto Rojas, Director del Observatorio de Asuntos Internacionales de la Universidad Finis Terrae; a Guido Larson, Director del Instituto de Humanidades de la Universidad del Desarrollo y a Carolina Mardones, decana de la Facultad de Comunicaciones de la UDD.
Los invitados analizaron el contexto histórico en que se desató la guerra -el fin de la guerra fría- y cómo Saddam Hussein, líder de Irak, decide invadir y anexar Kuwait, provocando la reacción inmediata de una coalición de 34 países liderada por Estados Unidos y autorizada por las Naciones Unidas, la que fue conocida como “Operación Tormenta del Desierto”. El conflicto, que se inició el 2 de agosto de 1990 y finalizó el 28 de febrero de 1991, terminó con Hussein derrotado y con fuertes sanciones impuestas a Irak.
“Después de la Guerra de Vietnam existía claridad de que los medios de comunicación eran un elemento clave para conseguir la adhesión de la opinión pública”, explicó Carolina Mardones destacando el hito que marcó el conflicto en la historia del periodismo televisivo. “Cuando hay una guerra una de las primeras víctimas es la información. De inmediato surge el desafío periodístico de verificar y filtrar la información que te entregan. Los involucrados quieren transformarte en una correa transportadora de la información que ellos quieren transmitir”, señala la decana, quien en esa época trabajaba como periodista del Departamento de Prensa de Canal 13.
Carolina recordó la calidad de la información que recibían: imágenes oscuras con una pequeña luz, más parecidas a un juego de video que a una guerra en vivo. También recordó cómo se relevaba el tema del armamento por sobre el drama que vivían los seres humanos. “Había una deshumanización de la guerra”, apuntó la decana.