Fue un conversatorio, pero tomó ribetes de debate durante gran parte de la hora que duró. La actividad Votamos Tod@s reunió esta vez a los ex convencionales Fernando Atria y Ruggero Cozzi, en una conversación moderada por Valentina González, profesora UDD y periodista de El Mercurio.

La jornada comenzó con definiciones de ambos políticos. A la pregunta sobre la misión de la Nueva Constitución, Cozzi aseguró que esta “no va a solucionar los problemas del país de un día para otro”, mientras que Atria dijo que “es el camino de salida de la crisis en la que el país se encuentra”.

Para el abogado constitucionalista de Apruebo Dignidad, “lo que se necesita es cambiar los términos de nuestra convivencia, reemplazar la unilateralidad que se manifiesta en abusos por la reciprocidad. El Estado Social de Derechos se encarga de que la riqueza vuelva a la sociedad para beneficiar a todos”

Sobre la pregunta por temáticas como la paridad y el medio ambiente, aseguró que “el chileno es el primer proceso constituyente que incorpora las demandas del feminismo y la conciencia de la crisis climática. En ese sentido será probablemente el primero de nuevos procesos en el mundo que estarán marcados por estos fenómenos que llegaron para quedarse”.

“Estamos bastante de acuerdo en que había un malestar y una orientación que considero correcta, el Estado Social de Derecho, pero concentra todo en el Estado y no en un modelo mixto. La paridad también me parece bien”, sumó Cozzi.

Luego los exconvencionales debatieron sobre los puntos más sensibles del texto constitucional: derechos sociales, sistema de salud y pensiones. Y sobre todo en el modelo de desarrollo que subyace en la nueva Constitución.

“¿En qué cosas veo que la solución que plantea no es la correcta? En materia de salud hoy tenemos sistema mixto, que tiene convenios para que los pacientes de Fonasa se atiendan en clínicas privadas. En pensiones, existe el pilar solidario, que en 2008 mejoró el sistema.  Eso cambia con la nueva constitución, porque el objetivo es destruir el estado subsidiario y tener un estado solidario, y ambas formas no son incompatibles”, advirtió Cozzi.

“Me intriga y desconcierta la cuestión del Estado. No sé qué habría que decir para estar a salvo de la crítica de que es todo para el Estado. La nueva Constitución reconoce un Sistema Nacional de Educación compuesto por establecimientos reconocidos por el Estado, un Sistema Nacional de Salud que estará compuesto por prestadores públicos y privados, y en Seguridad Social no ordena un sistema de reparto ni declara inconstitucional la capitalización individual. Los derechos sociales pretenden configurar esferas de la vida estructuradas en la igualdad y no priva el acceso a los derechos dependiendo del dinero que se tiene”, refutó Atria.

“El concepto de dignidad me parece bien que esté en una constitución. Pero las discusiones de política pública son otra cosa, en Noruega tienen cárceles con mejor estándar que una vivienda de clase media en Chile. Si tuviéramos algo así en chile generaría resistencia porque hay temas culturales. No bastan las meras declaraciones sino que las políticas públicas que permitan mejorar la calidad de vida de las personas. El modelo de desarrollo que hay detrás para alcanzar esos mínimos materiales ¿es el correcto? Yo creo que no y Fernando cree que sí, ese es el fondo de la discusión”, concluyó Cozzi.