Para llegar hasta acá tuve que superar algunos temores y aprovechar la oportunidad que se me estaba dando. Por eso, partí de la premisa que un viaje como este me ayudaría a crecer como profesional, pero por sobre todo como persona.

Llevo un mes y dos semana en Madrid, España. Cuando en septiembre pasado supe que la universidad me beneficiaría con una beca para realizar un intercambio académico no lo podía creer. Desde mi ingreso a la carrera en 2015 nunca estuvo entre mis planes viajar mientras estuviese estudiando. Era un sueño que no veía tan próximo, hasta que el semestre antes del viaje me decidí a postular a la beca DRI de la UDD.

Así se fueron dando las cosas, opté por salir de mi zona de confort, tomé y acepté el riesgo de aventurarme por primera vez solo fuera del país. Comencé esta travesía que desde el primer minuto fue un reto para mí, dudé mucho, pero no me arrepiento porque la experiencia ha sido enriquecedora.

Cada día es un nuevo desafío, una oportunidad para conocer otra cultura, dejarme sorprender y adaptarme a un continente que cuenta con otra visión de la sociedad, más avanzada por supuesto, con sus auténticas conductas y maneras de vincularse.

El choque cultural es algo duro de enfrentar, los apegos se hacen presente. A ratos he extrañado, pero poco a poco me he encantando de esta ciudad, de su arquitectura y sus paisajes. Creo que la habilidad de adaptarse a los cambios es una destreza necesaria, con la que todo profesional debería contar, sobre todo en el Periodismo. La tolerancia a la frustración y la perseverancia es lo que más rescato de esta experiencia que la UDD me ha entregado y que sin este apoyo, el de mi familia y mi círculo más cercano no habría sido posible.

Hoy me encuentro cursando asignaturas de las áreas que más me gustan de la carrera, por las que he incursionado en mi paso por la universidad y quiero seguir perfeccionando antes de entrar de lleno en el mundo laboral; Producción en Televisión, Fundamentos de la Fotografía y Pensamiento Creativo son parte de los ramos que decidí cursar. El abanico de posibilidades es amplio y el equipamiento que ofrece la universidad Ceu San Pablo -en convenio con la UDD- cuenta con las herramientas e instalaciones necesarias para cumplir mis objetivos de aprendizaje, por lo que me he sentido a gusto y conforme.

Aún me queda un largo camino por recorrer. Espero seguir aprendiendo, viajando y sacando el máximo provecho a esta instancia. Nutrirme de cada enseñanza por más mínima que sea y así volver a poner en práctica aquellos conocimientos, terminar la carrera y enfrentarme a nuevos desafíos de la manera más íntegra posible.