Los estudiantes deberán crear una campaña para transmitir un mensaje positivo sobre los inmigrantes para que no sean el chivo expiatorio de los problemas estructurales de Chile.

La visita de Fernanda Ramos, coordinadora nacional de Comunicaciones del Servicio Jesuita a Migrantes, marcó el comienzo del trabajo de Taller 5 sobre un tema muy actual: la migración en Chile.

El profesor Luciano Gougain invitó a la periodista para que diera una charla sobre el tema a los estudiantes, quienes conocieron de primera fuente las visiones y discursos con que se representa el tema en nuestro país, donde habitan 500 mil extranjeros.

En ese sentido, Fernanda se explayó sobre los 3 tipos de enfoques que habitualmente escuchamos en los medios: Instrumental (el migrante vale en relación a y Derechos Humanos su aporte a la economía), Seguridad Social (restringir el ingreso de migrantes) y Derechos Humanos (los migrantes valen en cuanto personas).

“Hay que tener cuidado con el enfoque instrumental de los migrantes, en relación a valorarlos sólo como un aporte o una oportunidad. Finalmente se convierten en una oportunidad para pagarles menos del sueldo mínimo, para que trabajen más de 8 horas o para arrendarles piezas donde viven hacinados”, indicó Fernanda.

De igual forma criticó el enfoque de Seguridad Social. “Las políticas restrictivas como la visa de 3 meses para conseguir un permiso de trabajo, facilita que el 70% de los migrantes vienen a Chile a trabajar, sean explotados en el mercado laboral y surja un mercado informal de venta de contratos”.

La problemática a resolver es que en Chile hay muchas personas que se oponen a la inmigración, y hay que empatizar con ellos porque son los que viven en el día a día con los migrantes, que tienen que compartir el cité, tolerar sus costumbres que son diferentes y sentir que pierden el cupo en el consultorio.

“Ese es el grupo objetivo con el que vamos a trabajar. Decirle a esas personas que son xenófobos no sirve de nada, los chilenos se cansaron de que los reten. Deben buscar un mensaje positivo para que ellos entiendan que la migración es algo bueno, que existe desde que existe el hombre y que es un fenómeno que nunca terminará”, explicó Fernanda.

“Necesitamos que los votantes obtengan un mensaje más positivo sobre la migración, que los migrantes no sean un chivo expiatorio de nuestros problemas estructurales”, concluyó.