Tras titularse en 2012, la Periodista llegó a la capital sin pensar el vuelco que daría su carrera. Hoy nos cuenta su emprendimiento.

Llegué a Santiago a fines del año 2012 a hacer mi práctica profesional en CNN Chile, justo después de haber egresado de la universidad. Fue entretenido, me quedé trabajando en ese medio cerca de un año, pero debido a problemas del canal fui desvinculada junto a decenas de compañeros a principios de 2013.

Ya tenía decidido que no quería seguir trabajando en prensa, pero seguía confundida respecto a mi vocación. Fue durante mi búsqueda de pega que mi papá me ofreció un “pituto” en su productora de eventos, ayudándolo en la planificación de matrimonios. Y nada que hacer, fue amor a primera vista, no me importaba tener que trabajar de noche ni el estrés que conlleva el trabajo. ¡Me encantó desde el primer día!

Ahora llevo cerca de tres años dedicada a este rubro, entregada completamente a la producción de matrimonios en el centro de eventos Casa Bosque y a mi empresa Renatta Titerman Wedding Planner, en la que asesoramos a las parejas en todo lo relativo al matrimonio, cuidando su presupuesto, asesorándolos y supervisando que todo sea como ellos siempre lo soñaron, evitándoles todo el estrés que conlleva una celebración tan importante.

Es un trabajo que implica horarios extraños, fines de semana ocupadísimos, con pocas horas de sueño y la necesidad de estar siempre conectada con nuestros novios, pero la verdad es que nada se compara con trabajar con personas felices y enamoradas y en un ambiente de celebración.

Lo mejor de emprender es que pese a lo cansador que puede ser, nada te motiva más que ver como tu trabajo rinde frutos. Y pese a que el concepto de wedding planner  aún no es muy conocido en Chile, es gratificante ver como cada día aumenta la cantidad de novios que se interesan por nuestros servicios.