La alumna egresada de Periodismo trabaja en la Dirección de Relaciones Internacionales de la Universidad San Pablo CEU en Madrid, España.

Viajar al extranjero no sólo es vivir en otro país o aprender cosas nuevas, es mucho más que eso. Es una oportunidad que te permite conocer diferentes culturas, formar nuevas amistades, eliminar prejuicios y sobre todo crecer de forma personal y profesional. Una experiencia que tiene fascinada a Antonia Azócar. Revisa su testimonio a continuación:

“Todo surgió por casualidades de la vida. Mis papás me habían comprado un pasaje a Madrid como regalo de titulación y tendría la oportunidad de conocer Europa por un mes.

Sin embargo, un día me llegó un correo de la Facultad que ofrecía una práctica profesional en la Universidad San Pablo CEU de Madrid, España y que iniciaba en septiembre. Todo coincidía, así que decidí postular sin tener mayores intenciones de quedar, ni dinero, ni tiempo.

Unas semanas después me hicieron una entrevista por Skype y tras pasar ese filtro, quedé. Estaba muy emocionada, le conté a mi mamá y a sorpresa mía, me apoyó en este nuevo desafío que me permitirá crecer de forma personal y profesional.

Llegué el 5 de septiembre a Madrid y me incorporé enseguida a trabajar en la Dirección de Relaciones Internacionales de la Universidad. En este lugar mí labor es guiar a los alumnos de la Universidad San Pablo CEU a iniciar algún programa de intercambio e ingresar a los estudiantes extranjeros que quieren estudiar con nosotros. También he debido hablar inglés y francés para comunicarme con ellos.

Me ha gustado un montón trabajar aquí, porque mis compañeras son muy simpáticas conmigo y me han hecho sentir muy cómoda y en confianza. El ambiente es flexible, hay bastante diálogo y risas. Estoy muy agradecida por esta experiencia.

A pesar de que estaré hasta diciembre trabajando en la oficina de Relaciones Internacionales, me gustaría tener la oportunidad de ser contratada porque esta ciudad es hermosa y está llena de cosas entretenidas para hacer”.