¿Por qué los jóvenes de hoy pasan la mayor cantidad de su tiempo libre frente a la pantalla de un computador? ¿Afecta esta conducta su desarrollo social y emocional? ¿Cuáles son los riesgos de este aislamiento característico de la era digital?
Intentar dar respuesta a estas y otras interrogantes fue el objetivo del seminario organizado por la Facultad de Comunicaciones de la UDD, “Jóvenes comunicados en la era digital”, al que asistieron más de 150 personas, entre directores de colegios, orientadores, profesores de enseñanza media, psicólogos, publicistas y ejecutivos de medios de comunicación.
El encuentro se inició con una presentación de Sergio España, investigador del Centro de Investigación Aplicada Mediática UDD, sobre el tema “Jóvenes, medios y tecnologías de comunicación”.
España planteó que los jóvenes de este siglo son más tecnologizados (especialmente entre los 18 y los 25 años), más interactivos (utilizan Internet como herramienta para integrar los medios tradicionales) y más críticos que las generaciones anteriores, lo que a veces los aleja de la capacidad de comprensión de los adultos.
Indicó que la tecnologización la aprovechan especialmente cuando ella les abre posibilidades de sociabilizar, por ejemplo, a través del chat, el e-mail, los blogs o los fotologs.
Entre las oportunidades que les brinda a los jóvenes la tecnología, destacó la posibilidad de dialogar y resolver conflictos, tal como ocurre en el exitoso programa de TV “El diario de Eva”, donde la “Tía Pokemona” (Eva Gómez) los ayuda a solucionar sus problemas con amigos.
Por otra parte, el investigador de Mediática consideró como amenaza la ignorancia reflejada en algunas conversaciones recogidas de distintos chats, sobre todo en relación a temas sexuales.
Otra de las oportunidades que brindan las nuevas tecnologías de comunicación, a juicio de España, es la posibilidad de conocer el mundo adolescente a través de los fotologs, “el nuevo diario de vida sin llave”. En ellos los jóvenes buscan reafirmación y construcción de identidad. Al respecto hizo un llamado a quienes trabajan en pedagogía a visitar y conocer los fotologs de sus alumnos y llamó a practicar la “Pedablogía”, la enseñanza a través de blogs.
“Internet también ofrece una oportunidad a la publicidad”, indicó España. “Los sitios web –explicó- permiten una comunicación inmediata con los ciberlectores”.
Para finalizar, Sergio España concluyó que “existe una ceguera en no aprovechar las ventajas que ofrecen las nuevas tecnologías y su relación con los medios tradicionales”.
Luego de esta presentación, el seminario continuó con la exposición de los psicólogos Analía Stutman e Iván Armijo, ambos docentes de la Facultad de Psicología UDD, quienes analizaron las características de los adolescentes de hoy.
“Los jóvenes tienen una fascinación por lo nuevo, una tendencia a la impulsividad (no le tienen miedo a los que les toca enfrentar), son poco reflexivos, atrevidos y están centrados en el aquí y el ahora”, explicó Analía Stutman, Magíster en Psicoanálisis. “A diferencia del niño que quiere ser grande y del adulto que quiere ser joven, al adolescente le gusta el presente”, añadió.
Para Iván Armijo, los jóvenes no evalúan la posibilidad de correr grandes riesgos. Su cerebro aún está en desarrollo, no todas las funciones están completamente desarrolladas. “Los adolescentes tienden a deliberar las posibilidades lógicas de los riesgos, por lo tanto demoran más tiempo en tomar una decisión. Se detienen a pensar cosas que para los adultos no requieren análisis”, señaló el psicólogo.
Para Stutman, la tecnología brinda una enorme oportunidad desde lo cognitivo. “En Internet uno busca y encuentra. De ser pasivo (cuando la profesora entrega hasta la página del libro donde deben buscar) se pasa a ser activo, lo que produce placer”. A juicio de la psicóloga, desde lo socioemocional, la tecnología también entrega una gran ventaja. “Para la construcción de su identidad, el adolescente valora mucho el feedback del otro, la popularidad es muy relevante, lo mismo que la capacidad de impactar. Aquí encontramos la oportunidad del chat y el fotolog”.
Asimismo, como amenazas en este proceso de construcción de identidad, la profesional destaca:
- La imposibilidad de regular la intimidad, la pérdida de autoridad del contenido y la impulsividad, “el adolescente no reflexiona, aprieta el send y luego puede haber un gran arrepentimiento”.
- La tecnología no permite chequear la veracidad de la información que le llega al joven, lo que representa un riesgo.
- La tecnología no puede reemplazar el contacto de otro, que sí lo da lo social. “Internet no es tu amigo”.
- La tecnología puede llevar al joven a establecer relaciones poco sanas. Es fácil desinhibirse en Internet, no así en el cara a cara.
Respecto a su experiencia en el campo clínico, Stutman señala que “los jóvenes con mayor inhibición social son más abiertos al contacto con otros a través de Internet. Tienen una fobia al contacto real. Los jóvenes más sanos no tienen este interés por conocer a desconocidos”.
Acerca de la falta de ética que regula los medios tecnológicos, Iván Armijo explica que “la ética no se puede construir en el medio sino en los usuarios. Hay que establecer ciertos códigos, por ejemplo, que no todo lo que sale en Internet es cierto”.
Para Analía Stutman, el usuario debe contar con un código interno que le permita tener una conducta de control. “Por ejemplo, lo que pasó con el metro, cuando se fue dando sola la cultura de que al metro hay que cuidarlo. Este tipo de ética también debe ir dándose en los medios tecnologizados”.
Por último, ambos profesionales señalaron cuáles son las tares pendientes para padres y profesores respecto al tema de los jóvenes y su relación con la tecnología.
Para Armijo está el “comprender que los nuevos medios también son formas de expresión a través de las cuales se puede escuchar al joven y ayudarlo a sacar conclusiones. Tenemos que darnos el tiempo de escuchar y no enjuiciar en seguida, de revisar los fotologs y los chats. Ello nos acerca a los jóvenes”.
Para Stutman, la tarea pendiente más importante se relaciona con el plagio, que en Internet se da fácilmente a través de la copia y la tergiversación. “Al respecto hay algo que falta por hacer, no hemos creado una conciencia del uso cibernético”. Otra tarea pendiente para padres y profesores es regular la cantidad de horas, “no permitir que se caiga en un abuso del tiempo frente al computador”, terminó diciendo la psicóloga.
El encuentro fue moderado por la decana de la Facultad de Comunicaciones de la Universidad del Desarrollo, Carolina Mardones, y se realizó en el Aula Magna del Campus Las Condes.